Momus

C. de San Bartolomé, 11, 28004, Madrid

En Momus hay que tener los sentidos muy alerta, pues detrás de la barra no encontrarás refrescos, cervezas ni vinos; tampoco carta de comida, aquí solo se cocinan cócteles; eso sí, puedes llevarte a Momus los platos de otros restaurantes de la zona.

 

Lo que sí encontrarás en la barra y frente a tus ojos es la magia de los “sabores inesperados y técnicas actuales”, las dos claves de Momus. “Buscamos la extracción del sabor de forma distinta a la convencional. Todos los siropes, los tuestes, las melazas e incluso algunos destilados, como la ginebra de incienso o el ron de flores, los hacemos nosotros mismos con maquinaria y técnicas que desplegamos en la contrabarra y utilizamos en directo delante del cliente, como un showcooking líquido”.

 

Todo en Momus tiene un hilo conductor sutil pero presente. La coctelería lleva el nombre del dios griego de la ironía y la burla, el dios del carnaval en las ciudades donde esta festividad es especialmente importante.

 

En los colores que representan los cócteles, se reencontró con el niño que fue: “Ahora que soy padre, me he dado cuenta de las cosas que olvidamos de adultos, como ver por primera vez los colores y la sensación que eso te produce. Fijarnos en ellos es volver a ver las cosas con los ojos de un niño”. Esa sencillez aparente del color y ese gran descubrimiento que es la primera vez, esto es el reflejo de Momus.